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domingo, agosto 28, 2011

Tal vez.







-No mames, ya cállate pinche celular. Apenas son las 6 de la mañana y ya me estas molestando...






 Yo, tal vez, no llevo ni 40 minutos dormidos, la verdad no sé. Creo que regrese a las 5, o será que a las 5 salí de aquel bar. Y ahora que lo pienso: ¿sali acompañado o sali solito, así como entre? Solo recuerdo tu cintura, los huesitos que tienes por cadera y la seda que tienes por cabello. Sí, sali acompañado.


Tal vez cruce el puente para llevarte a tu casa, aunque en verdad queria que vinieras a la mia para hacer lo que hicimos en la tuya. 


Tal vez al final de la calle te besé sin que te dieras cuenta, y después te lleve a tu cama, también sin que lo supieras, te desgarre la ropa, tal vez de una manera poco ansiosa, te revolqué por la cama y por el piso...pero tu nunca me notaste.

Tal vez sali del bar echo un fantasma que habla de lejos, que habla del mas allá. Sali aferrado a ti, pero no sali contigo. Sali echo trizas para recoger mis pedazos en calle. Sali, seguramente, porque me echaron


Pero si recuerdo todo de ti. Si me acuerdo haberte dado mi número para que me llamaras cuando de ahí salieras, recuerdo haberte dicho que estaría cerca si así tu lo quisieras...


¡ESPERA!, ¿y si eres tu la que esta llamando? No, qué vas a ser tú. Seguro estoy soñando y esto es una mala pesadilla...



viernes, julio 22, 2011

BASTA

¡YA!, al demonio con esas frases estupidamente "inteligentes", total, ¿a quién le importa tanta pendejada saliendo de mi cabeza, pasando por mis dedos, y proyectandose en sus monitores? Pff, a nadie, lo sé.

Ya llevo 2, ¿o son 3?, semanas por acá por Tijuana y en ese tiempo me di cuenta de pequeños detalles que me revelan lo inmenso de la tierra. 


Yo, acostumbrado a vivir en el centro del país, estaba seguro que en todos lados a las 6 de la mañana salía el sol. O algo así. Pero aquí, en Tijuana, sale mas temprano y no estoy seguro si se oculta más tarde. Lo que me llevo a recordar que en el Polo Norte tienen meses completos de oscuridad, al igual que meses completos de luz. Pero, pocos son los que viven en el Polo Norte y que tienen la fortuna (¿será una fortuna?) de presenciar "un día" que dura meses. Por otro lado la gente que vive en New York, por ejemplo, deben tener también algunos "días" bastante mas largos a los que estamos acostumbrados nosotros los del centro del planeta, porque afrontemoslo,  México no es exactamente el norte ni el sur del planeta Tierra . Y es que en New York es una ciudad muy al norte del nuestro planeta Tierra, donde aun se puede vivir con todas las comodidades regulares de una civilización, (al contrario que en  el Polo Norte), y en NY  sí se pueden notar días más largos. O no sé. Es lo que yo supongo.


Claro que me gustaría vivir un tiempo en NY, más que nada, para experimentar los días mas largos de mi vida.  


PD. En verano los días son mas largos y en invierno las noches son más largas. Eso si lo sé, pero no sé si sea correcto. ¿lo es? 

viernes, julio 15, 2011

Ann II

Paso antes de lo esperado. Ya llevábamos cerca de un año saliendo juntos y la promesa de hacernos un tatuaje juntos la habíamos hecho desde el principio de nuestra relación. Claro que también era obvio que no nos tatuaríamos los nombres del otro en el pecho o las nalgas, eso no lo dijimos cuando acordamos en hacernos un tatuaje juntos, pero no era necesario mencionarlo, no éramos ni somos estúpidos para hacer tal cosa.
Ella llego a mi casa solo para tomar un té y el tema surgió de la nada, a mi me acababan de pagar un dinero atrasado en la editorial y ella siempre tuvo dinero de sobra. Ann venia de una familia de "gente bien", que digo bien, de gente muy bien. Había estudiado fuera de México la prepa y la carrera, y por cuestiones que nunca me ha querido contar regreso a México a mediados de los 2000les. El dinero le sobraba a ella y a su familia. Entonces para cuando me dijo que tenia ganas de tatuarse sabia que  tenía el dinero y el tiempo para hacerlo, solo le faltaba yo para poder hacerlo, porque  habíamos prometido hacerlo juntos, al fin siempre era yo el que nunca podía o nunca tenia ni el dinero ni el tiempo para hacerlo. Pero esta vez ella sabía que yo sí podía y que  también tenía dinero. No le pude decir que no, además era algo que yo también queria. Mi primer tatuaje, nuestro primer tatuaje. No sé por que postergaba tanto ese evento. 
Salimos de mi casa cerca de las 4pm, era una tarde bastante tranquila, nos subimos a su carro y no tardamos mas de 15 minutos en llegar al Estudio de Fito. Fito era un amigo mutuo, que curiosamente nos concia a los dos desde antes que nosotros nos conociéramos el uno al otro. Él era un artista del tatuaje y siempre apoyo la idea de Ann en hacernos un tatuaje, incluso nos decía que si nos lo hacíamos con él, nos haría un descuento. 
Todo fue bonito, risa, diversión y emoción. La tarde, los tatuajes y Fito quedaron en una tarde más de mi vida. Pero claro, me lleve conmigo, de por vida, el tatuaje que me había hecho Fito. Yo me puse un pez Koi que va desde la parte superior de mi espalda hasta  el frente de mi pecho. Ann se puso una flor muy colorida en el brazo, su tatuaje cubría casi la mitad de su brazo. Logicamente fuimos unas  veces más a donde Fito, porque es imposible hacer dos tatuajes como los nuestros en una sola sesión. 
Desde aquel día la amé más que nunca. ¿Por qué? No lo sé
Tampoco fue el ultimo que nos hicimos juntos, y menos, el ultimo que me hice yo. 



jueves, julio 14, 2011

Ann.

Lo siguiente es una solo una fracción de un cuento que esta escrito a pedazos y sin orden alguno. Se llama Ann.


-¿Entonces, cuando te veo?
Me dijo al oído, poco después de haber salido de aquel café donde nos encontramos. Era apenas la segunda vez que la veía, bueno, la tercera, para serles franco.
La primera vez la vi de lejitos en un bar que se llamaba Daniela, que estaba en la tercera avenida. O por ahí cerca. Ella bailaba con su amigas en la pista de la baile (¿anticuado decir: pista de baile?), me acuerdo bien, porque ese día llevaba el mismo vestido con el que viene vestida hoy. Esa vez no paso nada, de hecho poco caso le hice a ella, a Ann,  porque una de sus amigas me veía seguido  y de vez en vez me sonría, a ella si la recuerdo, pero a Ann...a ella nunca la noté.
La segunda vez fue todo mas relajado. Fue un día de campo en las afueras de la ciudad. Yo fui con mis hermanos, y la verdad, no sabía lo ni a lo que iba. Pero Juan, mi hermano, había insistido en que tenía que hacer algo en mis vacaciones, que por lo menos, debía salir a platicar o a que me "pegara el aire". Así fue como llegue a ese día de campo. Ann estaba ahí porque uno de los amigos de mi hermano era novio de una de sus amigas (Sí, así como el comercial de las hemorroides: eran amigos de un amigo. O algo así) Ese día todos iban acompañados, excepto nosotros dos, Ann y yo, claro. Entonces fue solo cuestión de tiempo para que alguien sin mucho que hacer nos presentara. Terminamos hablando de tonterías bajo un árbol. Nada más paso, nada en absoluto. No fue sino hasta que regresamos a la ciudad que me di cuenta de lo bien que la había pasado, y más que nada, que esos abrazos "sin sentido" que me daba tenian un sentido, claro, nadie abraza a un desconocido nada más porque sí. Idiota,la hubieras besado, hubieras besado a Ann; me reproché toda la semana.
Así es como llegamos a la tercera, que para mi es la segunda, porque la primera no cuenta. A la de "la vencida" (como dicen los perdedores que tienen fé en que alguna vez les ira mejor, aquellos que gritan convencidos al aire que: ¡la tercera es la vencida! O por lo menos debería ser.) Esta vez me la encontre en la calle y la invite a tomar un café. Solo eso, café y nada más. Ya había pasado tiempo desde el día de campo en el que compartimos tonterías bajo un árbol, entonces me pareció lo más indicado solo invitarla a tomar café. Ann acepto sin pensarlo dos veces. Quedamos de vernos en el Tea&Coffe a las 5 en punto,(que nombre tan original , ¿no?). 
Yo llegue un poco antes de lo pactado, poco después llego Ann, se había cambiando y maquillado o algo así. La verdad ahora que lo pienso se desmaquillo, sí, eso hizo. Pero definitivamente se cambio de ropa, ahora traí puesto ese vestido de rallas negras con blanco, ¿o será rallas blancas con negro?
Nos sentamos en el ventanal que da hacia la catedral. Platicamos durante 1 hora y minutos mas...entonces hice mi primer movimiento: le tome la mano mientras ella la extendía sobre la mesa, me vio directo a los ojos y no dijo nada, solo sonrío y me tomo de la mano de vuelta. Seguimos platicando solo un rato sin mayor problema, pero la respuesta había sido obvia: los dos queríamos algo mas que café...Así conocí a Ann. Mi querida Ann.