Pagina Principal

miércoles, julio 25, 2012

Sin paracaídas.

Somos la noche nublada cayendo con prisa sobre el cielo azul sin nada que nos detenga, el mismo tiempo nos impulsa a caer más rápido. Somos dos suicidas que se avientan del edificio más alto que pudieron encontrar, esperando que al final de la caída sólo queden manchas de sangre en el pavimento, sesos y cachos de humanos por todos lados. Somos los locos que juegan ruleta rusa y al ganar tiran del gatillo lo más rápido posible. Estamos mal. Estamos locos. Estamos jodidos. No somos el uno para el otro. ¿Te cuesta aceptarlo? A mí no. Yo ya iba en picada cuando te conocí y tú ibas kilómetros adelante de mí. Estamos jodidamente jodidos. Nos chingo la vida y ni condón llevaba puesta. Así somos: ¿nosotros? 

miércoles, julio 11, 2012

Las mentiras también flotan en el aire.


Somos los rayos del sol que se asoman acosando la intimidad. A quién le importa las secuencias. No somos los mismos que fuimos la noche de anoche, tampoco somos los mismo que fuimos a medianoche, después del humo que pasamos por nuestros labios, del humo que compartimos. Nos acercamos. Nos quemamos. Quemamos todo lo que necesitábamos: miedos, olores, pudores, risas, piel, besos, intimidades, confesiones interminables, uñas, botellas, gritos y gemidos, canciones. Volamos. Nos besamos. Intimamos para dormir en la misma cama y después apenas tocarnos, cada quien acostado en un extremo de la cama. Así somos nosotros. Así se nos cayo la noche. Silencio. 

lunes, julio 09, 2012

Medianoche I

Miles de  veces nos decimos "te quiero", así, de lejos, de mientras, de letras y de palabras en pantalla. No tenemos la demencia de decirlo al aire, al alma, cuando estamos juntos. ¿Será que nos tenemos miedo? Posiblemente y lo más seguro: sí ...¿Pero miedo a qué?  ¿A perdernos? Si perdidos estamos desde que nos cortan el hilo que nos une a nuestra madre, desde entonces estamos perdidos en un mundo que nadie conoce y todos dicen conocer...¿Ó es miedo a perdernos nosotros? Y después de todo, la vida misma se va encargar de perdernos a nosotros, porque bien sabemos que todas las promesas están vacías. Yo por eso no prometo nada, y menos te prometo cosas a ti. Porque sé que no te las puedo cumplir ó más bien porque sé que no te las voy a cumplir. Porque así soy, un incumplido que no acaba nada, en mismas palabras tuyas: soy un irresponsable que nunca termina lo que empieza. Duele. ¿No? ¿Tú qué eres? Quisiera decirte, pero no tengo las ganas de hacerlo aquí, en pantalla, por medio de la punta de mis dedos, NO, ya no. Ahora quiero decirte las cosas de frente, al alma, sintiendo y viendo....